viernes, 30 de abril de 2010

-Antes de la batalla decisiva.

No hay nada como una película épica para subir la moral. Aunque es ficción no deja de ser estimulante: un ejemplo de cómo se puede luchar por los sueños sin ceder ante las dificultades. En la escena de este film, uno de mis preferidos, se refleja la actitud del vencedor: no achicarse, ya de entrada, ante un evento o rival que aparentemente nos supera. No dejar de intentar de hacer algo porque parezca imposible.

(Picar en la foto para ver video)


Y ahora, para restarle trascendencia al asunto, una versión cachonda de El Sevilla
:))

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